Barranquilla - Bus y bollo

29 de julio - 2022

        

Justo detrás del Museo de Arte Moderno de Barranquilla, al que le llaman el orinal y que está al lado del Museo del Caribe donde tampoco hay nada, se parquean los buses que van a Puerto Colombia. En apariencia el concreto funciona. Los edificios son grandes, hay una entrada donde hay cocina que tal vez funcionó hace poco, las plazoletas amplias, la gente se parcha en el andén. A ninguno de los museos se puede entrar. El Museo del Caribe tiene un guardia que pasa el día con su camiseta con el logo del museo, sentado en una silla rimax a la sombra de un árbol. No deja que nadie se acerque. Cuida el concreto, porque no hay museo. Al Museo de Arte Moderno no dejan entrar, porque es un peligro y una ruina con agua que gotea por dentro y por fuera. Dicen que hay un cementerio indígena debajo. Dicen que hay un ojo de agua que nace desde las entrañas del piso y que por eso el cemento no aguanta. Pero aquí todo lo aguanta el cemento porque el cemento es el negocio, dice un amigo. Aquí construyen y construyen, pero no les importa que pasa después, porque el negocio es construir. Es decir, no importa si se cae, incluso es mejor porque el negocio es el cemento.

Este encuentro se hizo en el marco de un Laboratorio – residencia organizada por el 46 Salón Nacional de Artistas. Con los participantes empezamos a pensar en un lugar para hacer el encuentro. Anotamos una lista donde decía motel, casa funeraria, casa mansión que después fue concesionario de carros. Después pensamos en un bus en movimiento y nos dimos cuenta de que nos podíamos marear, entonces definimos un bus que parara en dos lugares: el parqueadero de la catedral, por donde circula mucha gente, y una esquina de Barrio Abajo enfrente de una tienda para comprar pola. No pudimos hacernos detrás de la catedral porque había un festival de perros calientes, entonces nos hicimos al lado de la Plaza de la Paz, de espaldas al festival, al lado del caí. Dimos bollos que consiguió Liz Manjarrés, bollo angelito y bollo limpio con jugo de corozo. El encuentro se llamó Bus y Bollo.

preparando la oficina

Stefany Diaz, Curación

Loraine Barraza, Cinco veces, 2022

Apuntando pasajeros

Julián Camargo, Destapa, 2022

José Flores, De millón a cero, 2022

Andrés Contreras, Hey llave, 2022

Maylex Villamizar, Desahogo, 2022

Danna Mancera, Premoniciones, 2022


Se regó el jugo de corozo

Andru Suarez, Los secretos del bus, 2022

Andru Suarez, Los secretos del bus, 2022

Shanelli Barraza, Casa de hojalata, 2022

viajando de la plaza de la La Paz a Barrio Abajo

La esquina de Barrio Abajo

Jorge Serrano, Contador de cuentos, 2022

Gina Bello, Toyota Letal, 2022

Santiago Mendez, Ojos de vaca, 2022

Sin ficha técnica

Fernando García, Aquí cayó, 2022

Bayoan Castro, De vacación, 2022

Walvis Contreras, Del rio a tu mesa, 2022

Emma Anna, La teta de Yoko Ono, 2022

Laura Benitez, Sin Título, 2022

Detalle de Jose Flóres, De millón a cero, 2022

El frente del bus por dentro

Yanina Martinez, Limpergia, 2022

Isabella Contreras, Bolsillo universitario promedio, 2022

Ana Escorcia, Los bolleros del 84, 2022

Ana Escorcia, Bailador barranquillero, 2022

Registro: Juan Tapias de Caribe Visual

18/8/2022

Noveno encuentro

Barranquilla - Bus y bollo

29 de julio - 2022

        

Justo detrás del Museo de Arte Moderno de Barranquilla, al que le llaman el orinal y que está al lado del Museo del Caribe donde tampoco hay nada, se parquean los buses que van a Puerto Colombia. En apariencia el concreto funciona. Los edificios son grandes, hay una entrada donde hay cocina que tal vez funcionó hace poco, las plazoletas amplias, la gente se parcha en el andén. A ninguno de los museos se puede entrar. El Museo del Caribe tiene un guardia que pasa el día con su camiseta con el logo del museo, sentado en una silla rimax a la sombra de un árbol. No deja que nadie se acerque. Cuida el concreto, porque no hay museo. Al Museo de Arte Moderno no dejan entrar, porque es un peligro y una ruina con agua que gotea por dentro y por fuera. Dicen que hay un cementerio indígena debajo. Dicen que hay un ojo de agua que nace desde las entrañas del piso y que por eso el cemento no aguanta. Pero aquí todo lo aguanta el cemento porque el cemento es el negocio, dice un amigo. Aquí construyen y construyen, pero no les importa que pasa después, porque el negocio es construir. Es decir, no importa si se cae, incluso es mejor porque el negocio es el cemento.

Este encuentro se hizo en el marco de un Laboratorio – residencia organizada por el 46 Salón Nacional de Artistas. Con los participantes empezamos a pensar en un lugar para hacer el encuentro. Anotamos una lista donde decía motel, casa funeraria, casa mansión que después fue concesionario de carros. Después pensamos en un bus en movimiento y nos dimos cuenta de que nos podíamos marear, entonces definimos un bus que parara en dos lugares: el parqueadero de la catedral, por donde circula mucha gente, y una esquina de Barrio Abajo enfrente de una tienda para comprar pola. No pudimos hacernos detrás de la catedral porque había un festival de perros calientes, entonces nos hicimos al lado de la Plaza de la Paz, de espaldas al festival, al lado del caí. Dimos bollos que consiguió Liz Manjarrés, bollo angelito y bollo limpio con jugo de corozo. El encuentro se llamó Bus y Bollo.

preparando la oficina

Stefany Diaz, Curación

Loraine Barraza, Cinco veces, 2022

Apuntando pasajeros

Julián Camargo, Destapa, 2022

José Flores, De millón a cero, 2022

Andrés Contreras, Hey llave, 2022

Maylex Villamizar, Desahogo, 2022

Danna Mancera, Premoniciones, 2022


Se regó el jugo de corozo

Andru Suarez, Los secretos del bus, 2022

Andru Suarez, Los secretos del bus, 2022

Shanelli Barraza, Casa de hojalata, 2022

viajando de la plaza de la La Paz a Barrio Abajo

La esquina de Barrio Abajo

Jorge Serrano, Contador de cuentos, 2022

Gina Bello, Toyota Letal, 2022

Santiago Mendez, Ojos de vaca, 2022

Sin ficha técnica

Fernando García, Aquí cayó, 2022

Bayoan Castro, De vacación, 2022

Walvis Contreras, Del rio a tu mesa, 2022

Emma Anna, La teta de Yoko Ono, 2022

Laura Benitez, Sin Título, 2022

Detalle de Jose Flóres, De millón a cero, 2022

El frente del bus por dentro

Yanina Martinez, Limpergia, 2022

Isabella Contreras, Bolsillo universitario promedio, 2022

Ana Escorcia, Los bolleros del 84, 2022

Ana Escorcia, Bailador barranquillero, 2022

Registro: Juan Tapias de Caribe Visual